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Sabiduría Total

La dieta definitiva

La dieta definitiva Después de unos días sin actualizar, debido al estricto cumplimiento del Primer Mandamiento de nuestra Secta: La Pereza, hoy de nuevo seremos guía para aquellos que se hallan perdidos en la penuria de sus tinieblas.

Dentro de la heterogénea diversidad de la población que habita en La Ciénaga hay una asimétrica, cuantitativamente hablando, y contradictoria tendencia a modificar el peso corporal.

Mientras el mundo subdesarrollado lucha por aumentar la media calórica de su alimentación diaria, la población del mundo occidental mantiene otra pugna por reducir esta misma tasa calórica.

Como la clientela de nuestra Secta engloba a los habitantes de este último grupo hacia ellos irá nuestra asistencia espiritual del jueves:

Hijos míos, ¿estáis agotados de probar estrambóticas dietas que no llevan a ninguna parte? ¿zaherís vuestro estrecho presupuesto en la compra de caros nutrientes dietéticos cuyo sabor recuerda al insípido sabor de los intestinos de una ballena (callos a la japonesa)?.

Ha llegado el momento de que experimentéis con LA DIETA DE LA GASEOSA.

Sí, la gaseosa, pese a su dulce y burbujeante sabor tiene un aporte calórico cercano al del agua y su precio, pues también. ¿Cómo podréis perder una cantidad ingente de peso con su ayuda? Bien, ante todo es una cuestión de sacrificio y mentalidad ZEN.

Fase 1 Ruptura con el pasado:

Abrid vuestra nevera y despojadla de cualquier alimento impuro. Para abreviar es mejor que os deshagáis de todos. No os preocupéis por el despilfarro, con menos de 10 euros volveréis a llenarla, ahora os diré como.

Fase 2 Captura de provisiones:

Id al supermercado más próximo y comprad 30 litros de gaseosa de la marca más barata y con el resto comprad un par de kilos de tomates.

Fase 3 Planificación de la dieta:

Coged lápiz y papel y organizad los días de la semana para poder subsistir con los alimentos recién adquiridos. Si lo tuyo no son las matemáticas te resumiré tu ración diaria: 4 litros y medio de gaseosa y un par de tomates.

Siguiendo estos tres pasos ya estás a punto de iniciar la dieta más demoledoramente efectiva después de la famosa DIETA DEL VINAGRE.

Es posible que transcurridas dos semanas de escrupuloso seguimiento de la dieta notes cierto hartazgo hacia la gaseosa. No problem: cómprate dos garrafas de vino peleón y redescubre las bonanzas de esta dieta.

De nada, amados discípulos, de nada...

Iso Gold Power!!!

Iso Gold Power!!! Las bebidas isotónicas (Acuarius, Gatorade, Anís del Mono...) tienen una grandiosa virtud poco explotada por el populacho. Todos alguna vez hemos sufrido una de esas resacas autodestructivas, como nuestra Secta, que nos ha provocado una pertinaz sed difícil de mitigar y que sobrevive horas y horas menguando nuestra voluntad y obligándonos a repetir, mental y oralmente, absurdas frases del tipo: "Ya no vuelvo a beber en mi vida".

Pues las bebidas isotónicas tienen la milagrosa propiedad de aplacar esa testaruda sed de manera casi fulminante. El problema radica que para que se obre el milagro es necesario ingerir una cantidad cercana al litro. Y la cuestión no es digestiva ya que ese litro, debido a la sed, se toma como un vaso de agua sino de índole económica.

Las bebidas isotónicas, pese a ser lo más parecido a la definición de "aguachirri", tienen un coste bastante elevado. La botella de Acuarius, sin ir más lejos, ronda el euro veinticinco (más de doscientas pesetas y ni te cuento la cantidad en reales). En resumen, que aliviar la resaca nos puede salir caro.

Pero esta difícil coyuntura se ha visto aliviada por la aparición en el mercado de bebidas isotónicas de marca blanca, es decir, marca nisupa* con un coste sensiblemente inferior a las más difundidas del mercado.

La que os voy a describir, IsoGold, la distribuye los supermercados Carrefour a 0'25 euros la lata. Supongo que también existirá en formato de botella que es la medida estándar para acabar con la sed de la resaca. Eso sí, comprobaréis, si os lanzáis a su compra, que su sabor es marcadamente similar al de un clásico de los refrescos en polvo: el Tang, pero cuando la sed resacosa se instale en vuestras gargantas creedme que os sabrá a gloria.

Consejo Publicitario patrocinado por: Destilerías DYC

*Nisupa: Ni su padre las conoce.